Susurrándote despierta.

Tengo mil cosas que decirte. Tan difíciles de explicar con palabras, como la manera en la que me siento cuando te tengo aquí, conmigo. Esa sonrisa que me hace ser feliz, la mínima tontería, cualquier estupidez, que te hace más y más perfecto. Como cambia el significado de un te quiero, al salir de tu boca. Eres esa razón por la que sonrío, esa sensación que hace que todo sea un poco más fácil. Esa manera de querer que tanto echaba de menos. La verdad nunca pensé que podría quererte de esta manera, ni que sentiría algo tan fuerte. Ahora me doy más cuenta de lo mucho que vales la pena, de lo tanto que me haces feliz. De lo fácil que se vuelve todo cuando te tengo a mi lado, y lo difícil que se me hace separarme de ti. Te quiero en mi vida, hoy, mañana y siempre. Me haces falta. Por primera vez en mi vida siento que he encontrado a alguien capaz de cambiar mi mundo por completo. Alguien con quien poder compartir esperanzas para un futuro, sueños que pueden hacerse realidad, momentos malos y buenos. Eres alguien con quien poder compartir emociones, aventuras y sonrisas. No me avergüenzo de llorar contigo cuando sufro, o reír a tu lado cuando me cuentas una de tus tonterías. Alguien con quien nunca lastimar tus sentimientos, sino fortalecerlos y mostrarle las cosas que te hacen ser especial. Poder sentir una tranquila calma cuando te tengo cerca. Ser yo misma sin preocuparme por lo que piense, puesto que me quiere por lo que soy, y no por lo que los demás quieren que yo sea. Los colores se ven más brillantes. Una mensaje suyo siempre me deja una enorme sonrisa en el rostro. Cosas que nunca antes te interesaron se vuelven fascinantes, porque sabes que son importantes para esa persona que es especial en tu vida. Abres tu corazón sabiendo que hay una oportunidad de que sea dañado, y en la apertura de tu corazón, experimentas el amor y la alegría que jamás habías creído posible. Te hallarás tan vulnerable y comprenderás que esa es la única forma de sentir el verdadero placer. Tu única esperanza y seguridad es saber que la persona a la que tanto quieres es parte de tu vida. Y te preguntarás que cómo se puede llegar a sentir esto? Pues muy fácil, simplemente con morirte de ganas por morderle los labios a cada milésima de segundo y a demostrarle lo mucho que le quieres y lo que le importas. Cerrar los ojos por un instante y olvidarse del mundo, poner la música baja y dejar la mente en blanco, concentrarse y que en tus sueños solo aparezca él y sus sonrisas, tú y tu mirada, todas las cosas hermosas que puedes darle sin más cuando las necesita consciente o inconscientemente, y relajarte y poder seguir soñandole. Acurrucarse dulcemente y sentir sus dedos acariciándote la mejilla y sus labios susurrándote un "te quiero" infinito. Que se para el reloj. Que no te importe la hora que sea. Si es de día o de noche a nosotros no nos afecta. Que lo único que te importe sea él. Subirse a una montaña rusa donde el ritmo marque los latidos de tu pecho. Donde él y tú lo único que tengáis que hacer es dejaros llevar. Y lo mejor es saber, que todo esto es lo que te apetezca hacer el resto de tus días.